La ortodoncia es el tratamiento odontológico empleado para corregir una descolocación de la dentadura, bien sea de uno a más dientes e incluso por un problema de mordedura en general, es decir, que la mandíbula superior y la mandíbula inferior no encajan correctamente.
Los dientes que se encuentran, torcidos, desalineados o encajados unos sobre otros, pueden provocar problemas de salud bucal como caries, enfermedades en las encías, problemas en la mordida o habla, desgaste del esmalte dental, infecciones y hasta problemas con el sistema auditivo.
Esto debido a que la mandíbula se encuentra directamente relacionada con el oído; por tal motivo es importante ir a consulta odontológica para que este profesional pueda determinar que tipo de ortodoncia es la más adecuada para tu boca.
Cualquier persona que tenga la boca en salud puede optar por un tratamiento de ortodoncia, el grado de severidad de las malformaciones determinará la duración y costo del mismo, y la elección de un sistema de ortodoncia u otro se realizará en base a las prioridades del paciente.
Cómo Funciona el tratamiento de ortodoncia
Se emplean diversos tipos de aparatos fijos y removibles, para lograr mover los dientes, entrenar nuevamente los músculos y modificar el crecimiento de las mandíbulas; estos aparatos funcionan ejerciendo una presión suave sobre los dientes y huesos, la severidad del problema determinará el enfoque ortodóncico.
El aparato fijo más común es la ortodoncia, consiste en un sistema de bandas, alambres y brackets, las bandas se fijan alrededor de los dientes y es utilizada como anclaje del aparato, los brackets son cementados en el frente del diente, los alambres del arco se pasan a través de los brackets y se atan en las bandas.
Hay aparatos fijos especiales, que son utilizados para controlar las consecuencias del mal hábito de succión del pulgar o del empuje de la lengua contra los dientes, estos aparatos son sujetados a los dientes mediante las bandas.
También encontramos aparatos removibles, como alineadores, tienen la misma función que la ortodoncia tradicional, pero sin alambres metálicos ni brackets, virtualmente invisibles; otros como los retenedores de espacio removibles, sirven para retener el espacio que haya dejado un diente.
Tenemos los retenedores removibles, que se utilizan en el techo de la boca y evitan que se corran los dientes a su posición original; los aparatos de reposicionamiento de la mandíbula, se utilizan sobre los maxilares superior e inferior y entrenan a la mandíbula a cerrarse correctamente.