Antes de que una mujer se someta a una operación de aumento de pecho es necesario que esté segura de ello, pues el paso que va a dar es muy importante por las consecuencias que este tipo de operaciones puede tener. Incluso en los casos más dudosos y extremos la paciente puede necesitar ayuda psicológica para digerir el cambio o también antes de la operación para constatar que está realmente preparada para la operación, ya sea para aumentar el pecho o para la elevación de pecho, que es otra de las cirugías más comunes.
Una vez que ha decidido totalmente pasar por el quirófano para aumentar su busto, lo más importante es elegir la clínica adecuada en la que nos ofrezcan las mejores condiciones (en mi caso en la Clínica Dra Ana Moreno me trataron con una gran profesionalidad y cercanía). El modo de proceder en este tipo de operaciones, una vez elegidas las prótesis o cuando se ha decidido el procedimiento de la elevación de pecho mediante prótesis de silicona, consiste en un pequeño corte que el cirujano realiza o bien en nuestra axila o bien en la zona de la areola de cada uno de nuestros pechos. Es a través de estas incisiones como se coloca las prótesis de silicona elegidas, pudiendo ir delante o detrás del músculo pectoral, algo que decide el propio cirujano sobre la marcha. El tiempo estimado para este tipo de operaciones es de 40 minutos y se realiza bajo los efectos de la anestesia general.
Tras este tiempo que dura la intervención permaneceremos en el área de recuperación de la clínica para vigilar que todo ha ido bien y poder recuperarnos de los efectos de la anestesia. Las primeras 24 horas después de cualquier operación son vitales por lo que si después de este tiempo todo ha transcurrido con normalidad podremos volver a casa. Eso, sí, debemos tener en cuenta que tendremos que aplicar una serie de precauciones como no hacer esfuerzo físico y además llevaremos un vendaje bastante ajustado que nos proteja de posibles golpes.
Este vendaje lo mantendremos durante aproximadamente dos días, cuando necesitaremos un sujetador especial y adaptado que llevaremos durante un mes entero las 24 horas del día para evitar complicaciones. Pasado ese mes, el más crítico para este tipo de operaciones, podremos ver los resultados reales de la operación.